La biotecnología en la agricultura se considera un complemento científico a la agricultura convencional, que puede ayudar a los programas de mejoras de plantas que permite la transferencia de material genético entre organismos que en situación normal no se mezclarían.
La nueva genética permitiría mejorar los rindes en zonas tradicionales de producción y habilitar el cultivo en nuevos ambientes. Los investigadores resaltaron la importancia del hallazgo en un contexto de sequías más intensas y frecuentes, producto del cambio climático.
El estudio de la Fundación Instituto Leloir y del CONICET descubrió los genes PRX62 y PRX69 que favorecen la capacidad de las raíces para absorber agua y nutrientes que escasean en suelos sometidos a 10°C.